viernes, 20 de abril de 2012

Robert Musil (el hombre sin atributos I)

-todo depende de un principio invisible. Pero ojo, con su administración y el discurso cantamañanesco


-aquellas frases emergian en medio de sus ocupaciones como islas, sin conexión ni afectación


-aquellas casas se alzaban como cariñosas tias, con sus sombreros anticuados, a la luz pálida del atardecer, agradables y sin importancia, todo menos seductoras. Provocaban hilaridad.


-cuando la nieve le molesta la compara a los cándidos senos femeninos y cuando llega a aburrirse de los pechos de su mujer, los compara a la blanca nieve


-las cosas no parecían hechas de madera y piedra sino de una moralidad grandiosa


-el sistema de medida y descripción que le habian aplicado los organismos policiacos, le entusiasmó como una poesía de amor compuesta por el diablo.

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