sábado, 21 de noviembre de 2015

Azorín (Tiempos y cosas)

-Delante de la iglesia de San Julián el Pobre, en Paris, comenzaba el Camino de Santiago(Pedro de Lorenzo)

-toda la retórica del humor, el afinadísimo genio de la ironía, sofocado en Azorín (P. de L.)

-leticia en la egestad ¿es que no ensaya en esa alianza de vocablos inusitados la gracia del humor (P. de L.)

-Azorín, apóstol españolde Montaigne

-leer, hablar con difuntos (dice Baltasar Gracián)

-lo diré sencillamente con la simplicidad con la que se relatan las grandes catástrofes

-pajarea por la escena

-milenarias bailarinas gaditanas que elogiara Marcial

-apechusques del brebaje

-lentos y patriarcales objetos

-Ra, mula ra¡, Uo¡ Uo¡ Yo que he oido más de ochenta oraciones parlamentarias en la pasada legislatura, me entusiasmo con estos breves discurso; el doctor Dekker participa de mi entusiasmo y los dos convenimos en que no habrá bienestar y paz en el país mientras toda la oratoria altisonante y falaz de las Cámaras y de los mítines no se reduzca a esta sencillísima y muy enérgica oratoria campestre.

-En España, los únicos oradores grandes, patrióticos y eficaces son los labriegos.

-afrenta a mis efusiones meridionales

-ojos sangrientos  que forman los nudos resinosos en las maderas

-el ideal de una mujer levantina está en comer arroz y golpear  los muebles.

-nuestro refugio supremo es el Casino provinciano

-los conciertos diminutos de las cosas son tan interesantes para el psicólogo y el artista como las grandes síntesis  universales

-este filósofo escéptico, cansado, y ya en los límites de la vejez, ha encontrado una de esas mujeres misteriosas que nos cautivan desde el primer instante. Y la ha encontrado, para que la sugestión sea completa, en la vieja y destartalada fonda de una vetusta ciudad castellana.

-los fenómenos son una superchería, y nosotros, vanos fantasmas

-el que vence no necesita dar satisfaccione; nunca se pierde reputación cuando se consigue el intento (Gracián)

-el éxito lleva en si mismo su sanción

-ni jerarquías sentimentales ni efusiones filantrópicas

-la masa es precisamente la que Wells llama el coeficiente del abismo.

-en ciertas épocas en las que la inteligencia alcanza su plenitud, en las que el goce corrosivo del conocer llega a su colmo, quedan disueltos, disgregados, los instintos vitales -como el de la maternidad- y llega, irremediablemente la decadencia.

-el vago rumor de las canciones conventuales me suenan a cosa inmutable y perenne, como los movimientos de los astros.

-detesto con todas mis fuerzas el ruido

-al final queda como sedimento en el espíritu una ironía indulgente o amarga, o un desprecio suave.

-sombreros que nos maltratan y nos quieren a la vez, como un antigo criado

-pasa una enigmática desconocida que nunca volvererás a ver

-mi oficio y mi arte es vivir (Montaigne)

-me contento con gozar del mundo sin apresurarme (Montaigne)

-pensar con los menos y hablar con los mas ( Gracián)

-somos cristianos con el mismo título que somos perigordinos o alemanes

-no fui el matrimonio; me llevaron (Montaigne)

-un cuadro es como un rey: debemos esperar a que hable antes que nosotros

-las sombras no son verdaderamente trasnparentes sino en los paises del Norte

-centelladura zarca del Guadarrama

-ese pequeño cuadro de Velazquez que representa una vista de Aranjuez, y en que un caballero se inclina ligeramente ante una dama, con una gracia, con una dignidad, con una elegancia insuperables, para ofrecerle una flor

-el español tose siempre en los momentos solemnes

-en la España contemporánea (1904)no hay más que ver la anarquía que reina en los espíritus, la obra disolvente de los partidos políticos, los prejuicios de la Prensa, el escepticismo, cada vez mayor, del pueblo hacia las clases directoras, la indiferencia cada vez más profunda de las clases directoras por el porvenir de la nación, el desvio y la pugna de unas regiones con otras...


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