jueves, 20 de diciembre de 2012

Confesiones de Jean Jacques Rousseau


-Emprendo una obra de la que no hay ejemplo y que no tendrá imitadores. Quiero mostrar a

Mis semejantes un hombre en toda la verdad de la Naturaleza y ese hombre seré yo.(p.1)

-Al nacer él murió su madre

-Plutarco: lectura favorita

-su hermano rebelde/cain se fue a Alemania y ya nada se supo de él.

-orinó en el puchero de la sra. Clot, vecina gruñona

-¿Quién diría que yo, viejo caduco, roído por las preocupaciones y los sufrimientos, me he sorprendido algunas veces llorando como un chiquillo al murmurar aquellos cantos con voz ya trémula y cascada?(p.5)

Tirsis, fr n'ose

Ecouter tan chalumeau

Sous l'ormeau;

Car on en cause

Déjá dans notre hameau.

.... un berger

... s'engager

sans danger;

Et tou/ours l'épine est sous la rose

No puedo explicarme en qué consiste el conmovedor encanto que encuentro en esta
canción; pero me es completamente imposible llegar al último verso sin derramar lágrimas.
Me ha tentado mil veces el deseo de escribir a París para saber el resto de las palabras que no puedo recordar, por si hay quien las recuerde todavía. Pero estoy seguro de que gran parte del placer que me causa el recuerdo de esta canción desaparecería al tener la prueba de que la han cantado otras voces que la de mi tía Susana.( 6)

 

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